El mundo de la fotografía ha cambiado mucho en los últimos años, y es que hemos pasado de tener que revelar fotos en la tienda más cercana, a vernos bombardeados en las redes sociales por cientos de miles de fotos con puntos de vista diferentes. Esto ha dilucidado mucho el trabajo de un profesional, pero en los detalles está la diferencia.
Todo el mundo puede hacer una foto con el móvil y subirla a internet, y en este proceso se pueden conseguir cientos de likes por ésta. Pero pasar de ser conocido por tus fotos amateur, a ser contratado como profesional para reportajes fotográficos supone un salto que no todo el mundo puede realizar, ya sea por talento o por medios. Pero como todo en la vida, hay que saber estar en el sitio adecuado en el momento adecuado, y saber reconocer y coger las oportunidades.
En este artículo te vamos a contar que es lo que necesitas para hacerte fotógrafo profesional. Estos son algunos consejos, pero no olvides que existen una gran cantidad de deberes formales con hacienda que debes de cumplir. La profesión no solo consiste en hacer fotos de calidad, sino en saber gestionar todo lo que conlleva el negocio.
Lo que debes de tener en cuenta para hacerte profesional
Indudablemente necesitas hacerte con una buena cámara de fotos réflex, a poder ser, una de rango profesional. Estas cámaras suelen costar un precio relativamente elevado, pero se supone que al dedicarte a la fotografía de manera profesional las acabas amortizando en poco tiempo. La diferencia está en el funcionamiento de estas cámaras: con una réflex profesional trabajas cómodo, alcanzas la mayoría de las funciones a un botón de distancia gracias a sus botones dedicados.
Como profesional de la fotografía necesitas objetivos especializados. Los hay especiales para retrato, para fotografía de deporte, para Macro, paisajes, etc. Piensa en el tipo de fotografía en que te quieres especializar. A partir de ahí encontrarás la respuesta a qué objetivos has de comprar. Aunque tengas que invertir algo de dinero en unos objetivos, además es una inversión más de largo de plazo. Generalmente un objetivo te va a durar toda la vida. El cuerpo de la cámara pierde valor con el tiempo, pero el objetivo ahí lo tienes, pasa el tiempo y su valor no baja prácticamente.
En un curso de fotografía profesional recibes orientación sobre el tipo de fotografía en que te conviene especializar, por cuánto deberías facturar tus reportajes, y un sinfín de trucos y astucias que sólo adquieres estando en contacto íntimo con la gente de este mundo. Además conoces cómo funciona el negocio, además de personalidades que te pueden apoyar en un futuro.
Como te imaginarás, necesitas un local o estudio de trabajo. Esto al principio no suele estar muy definido ya que si cubres bodas y reportajes sociales tal vez no te haga falta un estudio de trabajo como tal, o al menos no obligatoriamente. En cualquier caso, siempre puedes utilizar tu casa como centro de trabajo principal, y para reuniones con clientes siempre puedes alquilar despachos por horas como los que ofrece Cacplus, que dispone de despachos totalmente listos para usar de forma inmediata en Barcelona.
Para finalizar diremos que el camino a ser profesional en algo es difícil, pero merece la pena, pues ser tu propio jefe y especializarte en lo que te gusta pueden proporcionarte cotas de éxito elevadas.